J. Cole llama «terrorista» y «cobarde» a un policía por ser racista
J. Cole es un hombre de pocas palabras. Más allá de sus canciones, el de no suele pronunciarse sobre muchos temas, o por lo menos no es habitual verlo utilizar las redes sociales para explayarse sobre algo. Esta vez tampoco ha sido diferente, pero tampoco ha hecho falta que dijera nada más.
El trato racista de un policía hizo que Cole saltara
Un vídeo de un policía agarrando por el cuello sin ningún motivo aparente y siendo agresivo a la hora de pedirle la identificación se volvió viral hace unos días. La historia data del 2017, pero ha vuelto a hacerse popular por la carga racista de la actitud de James Cady, el policía.
El policía de Florida @BrowardSheriff con antecedentes de falsos arrestos y acoso, insulta al padre negro que está sosteniendo en brazos a su hijo y lo llama repetidamente «niño». VER VIDEO COMPLETO EN…
Allen Floyd no era sospechoso de ningún delito y retenía a su hijo de 9 meses cuando el comisario James Cady de @BrowardSheriff lo agarra por el cuello. Vea la entrevista completa con Floyd aquí:
Si eres aprensivo, te recomendamos que no veas el vídeo porque es bastante violento. En las imágenes se nota la agresividad del Sheriff y la incredulidad de Allen Floyd cuando le exige de forma muy acalorada que le enseñe su documento de identificación.
La cosa llega a las manos y se le escucha llamar «niño» al hombre, algo que tiene connotaciones racistas cuando lo usas para dirigirte a una persona adulta afroamericana.
Ante tal injusticia, Cole no pudo contenerse y respondió a estos tweets con un mensaje muy claro y conciso.
Cobarde y terrorista
Ni más, ni menos. El de ‘ATM’ explicó a la perfección lo que muchos pensamos al ver las imágenes del increíble suceso. Es una lástima que sigan ocurriendo cosas así en la actualidad. Estamos en el momento de cambiar y de tratar a todo el mundo con respeto sea cual sea el color de piel, su situación económica, o cualquier otro motivo que lleve a la gente a tener comportamientos discriminatorios.
Por suerte, estos casos visibilizan una realidad y cada vez estaremos más cerca del fin del racismo. Si hasta J. Cole lo condena por Twitter, es que el cambio ha comenzado.
El que también ha sufrido el abuso policial es Meek Mill y parece que no está teniendo muy buena suerte. El rapero ha chocado su Rolls Royce contra un Uber.